Los lubricantes rectales pueden aumentar el riesgo de adquirir infecciones de transmisión sexual
La trayectoria de unos treinta años de consejos acerca de sexo seguro se ha visto conmocionada durante la Conferencia Internacional de Microbicidas 2010, cuando un sondeo sobre uso de lubricantes en un grupo de mujeres y hombres gays evidenció que aquellos que los utilizaron para el sexo anal fueron tres veces más propensos a adquirir gonorrea, clamidia o sífilis que los que no emplearon ninguno.