Las nuevas directrices para las pruebas del VIH, publicadas el 18 de septiembre, instan a los trabajadores sanitarios de todas las especialidades a considerar la realización de la prueba del virus en un amplio rango de situaciones y entornos. Forma parte de un paquete de recomendaciones para reducir el número de las infecciones por VIH tardías y sin diagnosticar en el Reino Unido. Además, en aquellas zonas en particular donde la prevalencia del virus es alta, se recomienda que se realicen la prueba todas las personas adultas en todos los servicios sanitarios.