Un estudio realizado en China halla tasas de supervivencia similares a las observadas en personas trasplantadas con únicamente hepatitis B
Un estudio realizado por investigadores chinos y publicado en BMC Infectious Diseases ha concluido que el trasplante hepático en personas coinfectadas por el VIH y el virus de la hepatitis B (VHB) conllevaría buenas tasas de supervivencia a medio y largo plazo, junto a bajas tasas de complicaciones en el postoperatorio.
La mediana del seguimiento de los participantes coinfectados por el VIH y el VHB –que habían recibido el trasplante hepático-– fue de 36 meses (rango intercuartil [RIC]: 12-39 meses). La mayoría de ellos mantuvieron niveles de CD4 estables (por encima de las 200 células/mm3) y permanecieron con carga viral indetectable de ambos virus durante todo el seguimiento. Las tasas de supervivencia se encontraron por encima del 85% durante los tres años posteriores al trasplante (superando, incluso, las observadas en personas sin el VIH).
El estudio evidencia una mejora respecto a estudios previos, que a juicio de los investigadores se debe a la mejora continua de los tratamientos antirretrovirales y anti-VHB; que son cada vez más eficaces, tolerables y con menor potencial para interaccionar con los fármacos inmunosupresores que tienen que ser utilizados tras el trasplante.
El estudio se llevó a cabo con la participación de todas aquellas personas atendidas en varios hospitales de Shenzhen (China) coinfectadas por el VIH y el VHB que se habían sometido a un trasplante hepático entre el 1 de abril de 2019 y el 31 de diciembre de 2021. Sus resultados fueron comparados por las de aquellas personas monoinfectadas por el VHB que habían realizado un trasplante hepático en los mismos centros entre las mismas fechas.
El porcentaje de fallecimientos por infección fue similar en el grupo de personas con o sin el VIH (14,3% y 9,32%; respectivamente; p= 0,665). Tras el trasplante no se observaron diferencias significativas en las tasas de rechazo agudo, infección por citomegalovirus, bacteriemia, infección pulmonar, daño renal agudo, desarrollo de nuevos tumores y complicaciones biliares o vasculares.
Las tasas de supervivencia post-trasplante en personas con el VIH y el VHB fueron del 85,7% en el primer, segundo y tercer año posteriores. Dichas tasas, en monoinfectados por el VHB, fueron del 82,2% en el primer año, del 81,2% en el segundo y del 78,8% en el tercero.
Estos resultados evidencian que el trasplante hepático en coinfectados por el VIH y el VHB es una opción terapéutica con muy buenos resultados, con unas tasas de supervivencia y de complicaciones postoperatorias totalmente equiparables a la obtenidas en monoinfectados por el VHB.
Las principales limitaciones del presente estudio son su carácter retrospectivo y regional (por no contar con centros que abarquen áreas geográficas extensas). En todo caso, los resultados, a pesar de tener que ser confirmados en futuros estudios de mayor calado, son muy prometedores y esperanzadores para aquellas personas con el VIH y el VHB que tienen enfermedad hepática en fase muy avanzada y se encuentran en lista de espera de un trasplante hepático.
Fuente: Contagion Live / Elaboración propia (gTt).
Referencia: Tng, J., Weng, R., Fang, T. et.al. Clinical Outcomes of Liver Transplantation in Human Immunodeficiency Virus/Hepatitis B Virus Coinfected Patients in China. BMC Infect Dis. Published April 8, 2024. Accessed April 10, 2024. Doi: https://doi.org/10.1186/s12879-024-09284-2
