Había gente esperando cuando llegué. La enfermera me llamó y pasé. Estaba asustado, cardiaco. Es más, me pinchó el dedo y apenas sangré de lo tenso que estaba.
Me mandó esperar fuera y llamó a una chica. Apuesto la vida a que ella también se hizo la prueba. Ella también salió y rellenó un formulario como el que me habían dado a mí.
A los 15 minutos salió la enfermera, pero no me llamó a mí, que había sido el primero que entré, sino que la llamó a ella. En ese momento se me vino el mundo encima. Estaba claro que había dado positivo. La chica salió sonriendo con la cara de felicidad de sentir que se ha quitado un peso de encima. Me alegro por ella.
La enfermera lo hizo así, obviamente, porque conmigo llevaría más tiempo. Entré sabiendo lo que me temía. Ella me miro y me preguntó cosas. Yo la miré y le pregunté: “¿Dio positivo, verdad?”. Me miro seria y me dijo que sí.
Acto seguido me sacó sangre para la prueba de confirmación. Yo empecé a llorar. Me veía desbordado. Lo primero que pregunté fue: “¿Se me va a notar? ¿Qué esperanza de vida tengo?” Supongo que lo que se nos pasa por la cabeza a todos los que nos enfrentamos a ese momento.
Ella me ayudó a tranquilizarme y me tranquilicé un poco, pero, ¿para qué negarlo?, hasta que pasaron los días de la confirmación no hice más que llorar a escondidas. No podía dejar que mi familia me viera así.
Creía que mis planes se acabaron justo este año que tenía tantas ilusiones y de pronto esto… Lloraba por miedo, pero también por lo mal que lo podría pasar mi familia si se enteraba.
Rápido me mandaron al médico de infecciones y otra vez más pinchazos. Ahora ya el miedo era porque los CD4 no fueran muy bajos. Solo pensaba que no fuese tarde, pero os digo que con los medicamentos de ahora nunca es tarde.
Ya me han dado los resultados. Llegué temblando. Hace dos días me los dieron por la mañana y no han sido del todo malos. Mis CD4 están en 570 y una carga viral de 5.900 copias, que para mí es una burrada, pero que según mi médico no es nada. Y como él manda, pues será verdad, je, je.
Ánimo a todos, este bicho no me va a poder y un consejo: haceos la prueba, no hagáis como yo, que por miedo no iba. Si estáis con VIH es mejor enterarse por las malas que por las muy malas y con tratamiento es algo crónico.
Espero que os ayude mi experiencia, la escribo por aquí porque al saber el resultado me ha ayudado mucho leeros, así que pongo mi pequeña aportación y mucho ánimo a todos.
