Luego de sentirme mal el fin de semana decidí ir al laboratorio a hacerme un examen de rutina para saber qué me estaba afectando la salud. Cuando iba a pagar el examen decidí pedirle a la persona que me incluyera la prueba del VIH para descartar cualquier cosa y estar tranquilo.
Transcurridas unas horas volví por los resultados y para mi desgracia me dijeron "el HIV resulto positivo". En ese momento creo que morí. No supe qué hacer ni qué decir. Solo sentí la palmada en mi espalda de la doctora y las asistentes buscando agua para darme.
Lo peor era regresar a casa y decirle a mi pareja que estábamos infectados. Qué días tan difíciles he tenido, han sido los más largos de mi vida y me siento como en un túnel sin salida. Me preparaba para nuevos retos profesionales, lo que me tenía súper entusiasmado y desde ayer siento que todo acabó.
Hoy mi pareja y yo nos hicimos los exámenes confirmatorios, que salieron positivos y en un nivel bajo. Según la doctora apenas estamos empezando con la infección.
He tenido que ser el fuerte de los dos y cargar con todo esto. La verdad es que siento que pronto me cansaré, que no tendré ni ánimos ni fuerza para más nada. Siento que no hay más camino que recorrer y que los éxitos para mi han terminado.
Gracias por este espacio no tenía a quien contarle cómo me siento.