Cuando me dieron la noticia fue duro, no tenía ni fuerzas para llorar, sentí miedo, impotencia, tristeza… Todavía no se lo he contado a nadie porque he encontrado el apoyo que necesito en grupos de ayuda y personas que también son seropositivas.
Resulta extraño comprobar que en uno de los momentos más difíciles de tu vida quienes más te ayuden sean unos desconocidos, pero a mí me sirvió mucho hablar con ellos. Y me sigue sirviendo aún.
He aprendido que se puede vivir perfectamente con VIH, hay que cuidarse más, adherirse bien al tratamiento y adoptar hábitos saludables. Pero, afortunadamente, en España tenemos acceso gratuito a la medicación y especialistas muy buenos.
Recomiendo a todos los que estén pasando por mi situación que hablen con gente seropositiva, ayuda mucho ver otros puntos de vista y descubrir que no estás solo en todo esto.
Un abrazo a todos y ánimo!!!