Siempre traté de tomar las mejores decisiones en mi vida, fui muy humano y responsable, pues he vivido en soledad desde los 18 años y trabajado desde los 14.
No invitaba a personas a mi casa, mis papás sabían todo lo que hacía, siempre fui el mejor en mis trabajos. Si acaso no en la escuela, sin embargo, realmente me movía en un ambiente sano y muy familiar. Claro que en mi adolescencia hice cosas tontas, pero siempre pensando y sabiendo las consecuencias. Soy una persona muy consciente de todas mis acciones.
En esta última etapa de mi vida [ahora] tenía la plenitud de un gran trabajo, la responsabilidad de una casa propia y el sueño de irme al extranjero. Bueno, pues hace unas semanas me detectaron el VIH en mis estudios rutinarios del trabajo, que hasta hace 10 meses habían salido negativos.
Lo primero que pensé fue que no había forma, que no podía ser (aún lo pienso). Nunca he tenido relaciones sin condón ni había tenido situaciones de riesgo. Sin embargo, ya realicé todas las pruebas y es completamente cierto, incluso la infectóloga me comentó que, de acuerdo con las pruebas, no hace mucho que contraje el VIH.
La realidad es que no entiendo por qué a mí… Tengo amigos que se acuestan con muchas personas con y sin protección, a veces con 3 en una sola noche. Y yo, que en todo un año me acosté con dos personas y con condón, me fue a pasar. Así es la vida supongo, cuando te toca, aunque te quites…
Empezaré el tratamiento lo antes posible. Siempre tuve mucho miedo a esto y mi peor miedo se convirtió en realidad.
Puedo decir que, más allá de afectarme en mis sueños, destruyó mi confianza y seguridad. Me siento culpable de sentir atracción por alguien más, como si no tuviera ese derecho. De ser una persona que me consideraba a mí misma sexy, ahora me veo desagradable.
Me apena mucho tener esta condición (VIH+), porque no creo haber hecho nada para tenerla. Simplemente me tocaba, algo falló y esta es ahora mi realidad.
Solo espero conciliarme conmigo mismo y no cambiar tanto mi plan de vida.