Dos meses después empecé el tratamiento y ya para mayo estaba indetectable y curado de la sífilis. No he tenido efectos secundarios por los medicamentos, ya mi cuerpo los asimiló.
Hace 5 meses tengo que una relación con un hombre seronegativo. Él me apoya, nos amamos y le suma a mi vida. A mi familia se lo he ocultado para no alarmarlos. En realidad, muy pocas personas saben mi secreto y así lo prefiero.
A pesar que en este momento todo está bien en general y en este año ni siquiera he tenido un resfrío, hay una parte de mí que se siente muy triste. He subido de peso y me siento panzón a pesar de que no he dejado de hacer ejercicios, me agobia tener que comer tantas frutas cada día y estoy muy preocupado de todo lo que ingiero.
Mi pareja me apoya. Sin embargo a veces le cuesta entender que me sienta tan triste y sin ganas. En estos días he estado leyendo las historias de otras personas en esta página y me siento identificado.
Ahora solo vivo el día a día pues es lo que puedo hacer para sobrevivir al dolor que siento. No tengo una idea clara de cómo me llegué a infectar y solo quiero despertar de esta pesadilla. Tengo solo un sueño y es que al fin se descubra la cura de este mal y que todos tengamos una nueva oportunidad de vencer definitivamente a este virus.
Tengo mucha fe en Dios y es lo que me mantiene vivo, solo quiero sonreír de nuevo.