Soy médico y sólo le mandé hacerse una biometría hemática, cuyos resultados mostraron que tenía un poco de anemia, por lo que le dije que tomara hierro. Al poco tiempo tenía mucha fatiga y comenzó a sentarle mal cualquier alimento que comía. Fue cuando me preocupé un poco más y le mandé hacerse una prueba Elisa, la cual salió positiva obviamente. Después le mandé hacerse la prueba confirmatoria y positiva también. Sentía que me moría porque con él no tomaba mis precauciones.
Al poco tiempo, lleno de miedo, también me realicé los estudios correspondientes y salieron positivos también. Sentí que el mundo se terminaba y comencé a sentirme muy mal, hasta el punto de entrar en una grave depresión. Me preguntaba cómo era posible que yo, que sólo había tenido tres parejas, nunca había sido promiscuo y que además había tomado mis precauciones, ahora resultaba yo infectado. Quise morirme. Mi pareja me dio mucho apoyo. Hasta el momento, él está conmigo siempre.
Él, que había comenzado primero a sentir los síntomas de la infección hasta ahora no toma medicamentos, se mantiene bien, y yo, que me sentía como un roble, llevo más de un año tomando terapia. Gracias a Dios, me siento bien, en ocasiones me deprimo, pero ahí lo llevo.