La infección por el virus de la hepatitis B (VHB) está relacionada con un peor pronóstico en el caso de las personas que, además, están coinfectadas por VIH y el virus de la hepatitis C (VHC), según ha concluido un equipo de investigadores españoles en un estudio publicado en la edición digital de la revista AIDS.
En el mencionado trabajo, se comprobó que después de tener en cuenta otros factores, las personas que, aparte de VIH y VHC, tenían el virus de la hepatitis B experimentaron un aumento del 75% en el riesgo de mortalidad con respecto a las que solo tenían VIH y VHC. Según los autores, sus resultados suponen la prueba más sólida hasta la fecha de que la infección por VHB empeora de forma significativa el pronóstico de los pacientes coinfectados por VIH y VHC.
Los tres virus (VIH, VHB y VHC) tienen unas vías de transmisión similares y se sabe que existe una elevada proporción de personas que están coinfectadas por VIH y VHC, y también por VIH y VHB. Sin embargo, no existía demasiada información relativa a las consecuencias de la infección por los tres virus a la vez.
En consecuencia, un equipo de investigadores de la cohorte española VACH (véase La Noticia del Día 17/11/2008) decidió diseñar un estudio que implicó a 6.342 personas coinfectadas por VIH y VHC. El objetivo principal del estudio era determinar si la infección crónica por el virus de la hepatitis B (determinado a partir de un resultado positivo en la prueba del antígeno de superficie del VHB [HBsAg]) estaba relacionada con un mayor riesgo de mortalidad.
La prevalencia del virus de la hepatitis B en la población del estudio fue de un 6%. Las personas infectadas por los tres virus tendieron ligeramente a ser de mayor edad (37 frente a 36 años; p <0,01), fueron más propensas a ser de sexo masculino (87 frente a 80%; p= 0,001), a tener un menor recuento de células CD4 (251 frente a 293 células/mm3; p= 0,006) y a presentar un valor más alto en la escala APRI (índice que relaciona el nivel de aspartato aminotransferasa [AST] con el de plaquetas; 1,10 frente a 0,82, p= 0,002) que las personas que estaban infectadas únicamente por VIH y VHC.
En conjunto, los participantes en el estudio aportaron datos equivalentes a casi 26.000 persona-años de seguimiento. Se registró un total de 543 fallecimientos, lo que equivale a una tasa de 2,1 muertes por cada 100 persona-años.
No obstante, el equipo de investigadores comprobó que las tasas de mortalidad variaron en función de si las personas estaban coinfectadas por el VHB o no. Así, las tasas de mortalidad fueron de 3,78 por cada 100 persona-años en el caso de los pacientes que además tenían hepatitis B, frente a 2,01 por cada 100 persona-años cuando las personas no tenían hepatitis B.
En consecuencia, el análisis inicial evidenció que el riesgo de muerte de las personas con VIH y VHC aumentó en un 90% cuando, al mismo tiempo, tenían hepatitis B (1,90; intervalo de confianza del 95% [IC95%]: 1,42 – 2,54).
Sin embargo, también se comprobó que existían otros factores que asimismo influían en el riesgo de mortalidad, entre ellos haber sufrido de forma previa una enfermedad definidora de sida, la edad, el historial de tratamiento del VIH y de hepatitis C, el recuento de células CD4 y la carga viral.
Por este motivo, se llevó a cabo una segunda serie de análisis en los que se tuvieran en cuenta dichos factores.
Este segundo análisis desveló que la infección por el virus de la hepatitis B aumentó el riesgo de mortalidad aproximadamente en un 75% (1.745; IC95%: 1,41 – 2,67). Otros factores relacionados con un peor pronóstico fueron el tener una mayor edad y presentar una carga viral del VIH detectable. Por su parte, el hecho de presentar un recuento elevado de células CD4, estar tomando una terapia anti-VIH, recibir tratamiento con tenofovir (Viread®; también en Truvada®, Atripla® y Eviplera®) -un fármaco que es activo tanto contra el VIH como contra el VHB- y la terapia contra la hepatitis C fueron factores relacionados con una reducción en el riesgo de mortalidad.
El equipo de investigadores hizo referencia a los hallazgos de un estudio anterior en el que participó la misma cohorte de pacientes y que revelaron que la infección por el virus de la hepatitis B fue el factor más importante que influyó sobre el riesgo de sufrir enfermedad hepática terminal en las personas coinfectadas por VIH y VHC. Por su parte, los resultados del estudio actual mostraron que las muertes relacionadas con problemas hepáticos fueron más habituales en las personas infectadas por los tres virus que en las personas que solo tenían VIH y hepatitis C (42 frente a 24%).
Los resultados de este estudio ponen de relieve la relevancia que tiene la vacunación contra la hepatitis B para todas las personas con VIH, o en riesgo de adquirirlo.
Fuente: Aidsmap.
Referencia: Teira R, et al. Hepatitis B virus infection predicts mortality of HIV and hepatitis C virus co-infected patients. AIDS 27, online edition. DOI: 10.1097/QAD.0b013e32835ecaf7, 2013.
Suscríbete a los boletines
Utiliza este formulario para suscribirte en los diferentes boletines. Si tienes cualquier problema ponte en contacto con nosotros.
Al continuar, confirmas que has leído el aviso legal y aceptas la política de privacidad.