HIV Glasgow 2024: Las altas tasas de depresión y ansiedad en personas con el VIH indican la necesidad de implementar políticas preventivas de salud mental con una perspectiva integral e inclusiva

El mensaje I=I no solo ayuda a reducir el estigma, sino que también incentiva un enfoque positivo hacia el tratamiento del VIH que podría contribuir a una mejor salud mental

Ver otras noticias

La salud mental es un aspecto fundamental del bienestar general y su relevancia se magnifica en poblaciones con condiciones de salud crónicas, como es el caso del VIH. Un estudio presentado en el Congreso Internacional sobre Terapia Farmacológica del VIH (HIV Glasgow 2024), celebrado recientemente en Glasgow (Escocia, Reino Unido), ha puesto de manifiesto el impacto significativo que tiene el VIH no solo en la salud física de las personas, sino también en su salud mental, revelando tasas alarmantes de depresión y ansiedad. Es crucial abordar estos problemas empleando un enfoque integral que se centre no solo en los factores clínicos, sino que tenga en cuenta también los contextos sociales y económicos de dicha población.

El estudio analizó los datos de unas 4.622 personas que, entre abril de 2022 y marzo de 2023, accedieron a la atención del VIH en el Reino Unido (99 clínicas de Inglaterra, una clínica en Escocia y una en Gales). Uno de los hallazgos del estudio fue que el porcentaje de personas que presentaban síntomas de depresión era menor entre las que tenían interiorizado el mensaje I=I (Indetectable=Intransmisible), en comparación con las que tenían una creencia en el mismo (19% frente al 23%, de forma respectiva). Esto sugiere que la percepción y el conocimiento sobre la carga viral pueden tener un efecto significativo en la salud mental de las personas con el VIH. El mensaje I=I ha sido promovido como una herramienta de empoderamiento que no solo ayuda a reducir el estigma, sino que también incentiva un enfoque positivo hacia el tratamiento del VIH, que podría contribuir a una mejor salud mental.

Además, se comprobó que las personas con el VIH que sufren complicaciones adicionales de salud crónicas son más propensas a sufrir depresión, en comparación con quienes solo tienen el VIH (28% frente al 16%, de forma respectiva). Este hallazgo resalta la necesidad de implementar un enfoque holístico en el tratamiento de personas que enfrentan múltiples condiciones de salud, ya que la carga combinada de enfermedades o comorbilidades puede exacerbar problemas de salud mental.

El consumo de sustancias también juega un papel crucial en la salud mental de las personas con VIH. Los datos muestran que las tasas de depresión entre las personas fumadoras alcanzan un 32%, mientras que el 23% de quienes utilizan drogas no inyectables y un 39% de las personas usuarias de drogas inyectables presentan síntomas de depresión. La correlación entre el uso de sustancias y la salud mental indica que las intervenciones que aborden la salud mental deben considerar los hábitos relacionados con el consumo de sustancias como un factor importante a tratar.

Por otro lado, se ha observado una relación en forma de U con el consumo de alcohol. Aquellas personas que se encuentran en el rango de consumo moderado parecen tener menos síntomas de salud mental, sin embargo, las que no consumen alcohol o que consumen en niveles peligrosos presentan tasas elevadas de síntomas. Este patrón sugiere que el alcohol puede funcionar como un mecanismo de afrontamiento para algunas personas, a pesar de que su relación con la salud mental sea compleja y potencialmente dañina.

Un aspecto alarmante que se refleja en los datos es que cerca de la mitad de las personas con síntomas de depresión o ansiedad no están recibiendo tratamiento. Este hecho es particularmente notable entre los hombres heterosexuales africanos negros, ya que solo el 38% de ellos están recibiendo algún tipo de tratamiento para sus síntomas, en comparación con el 74% de hombres gais, bisexuales y otros hombres que tienen relaciones sexuales con hombres (GBHSH). Esta disparidad en el acceso y la obtención de tratamientos para problemas de salud mental subraya la necesidad de políticas de salud más inclusivas y accesibles que reconozcan y aborden las particularidades culturales y sociales de diferentes grupos.

La falta de atención a la salud mental no solo perpetúa el sufrimiento individual, sino que también tiene implicaciones más amplias en la salud pública y en la calidad de vida de las personas que viven con el VIH. El estudio también identificó a individuos que estaban recibiendo tratamiento, pero que no presentaban síntomas, lo que sugiere que la intervención adecuada está teniendo un efecto positivo. Sin embargo, esto pone de relieve la importancia de mejorar el acceso a tratamientos y la identificación temprana de condiciones de salud mental en esta población.

Considerando ambos factores, tanto los síntomas como el tratamiento recibido, el 36% de las personas con el VIH en el estudio mostraron evidencia de un problema de salud mental actual. Este hallazgo exige una atención urgente y prioritaria en el ámbito de la salud mental y el VIH, planteando la necesidad de una gestión que no solo se centre en el virus, sino que integre servicios de salud mental de manera coordinada y eficaz.

La conclusión de estos resultados resalta el imperativo de reconocer la salud mental como una prioridad en el manejo del VIH. Intervenciones que incluyan la identificación y gestión de la depresión y la ansiedad son esenciales. Además, deben ir acompañadas de un enfoque que contemple las necesidades socioeconómicas y sociales de las personas afectadas. Al abordar estos aspectos de manera integral, se puede contribuir a mejorar la calidad de vida de quienes viven con VIH, promover su bienestar mental y, en última instancia, crear un sistema de salud más equitativo y efectivo.

El camino hacia una atención más completa y humana para las personas que viven con el VIH enfatiza la importancia de formar equipos interdisciplinarios que trabajen juntos para identificar y atender las múltiples dimensiones de la salud, garantizando así que cada individuo reciba el apoyo y tratamiento que necesita para el manejo de su salud, así como para favorecer su bienestar y calidad de vida.

Fuente: EATG/Elaboración propia (gTt-VIH)
Referencia: Lampe F, Smith C, Pelchen-Matthews A, et al. Depression and anxiety symptoms among people with HIV in the UK: prevalence, correlates and treatment. Results from the Positive Voices 2022 study. HIV Glasgow 2024, abstract O42.

Suscríbete a los boletines

Utiliza este formulario para suscribirte en los diferentes boletines. Si tienes cualquier problema ponte en contacto con nosotros.

Al continuar, confirmas que has leído el aviso legal y aceptas la política de privacidad.

Redes sociales

¿No quieres perderte nada?
Síguenos en todas las redes

Gilead
MSD
ViiV
Gilead
Janssen
MSD
ViiV Healthcare
Abbvie
Abbvie
Abbvie
Abbvie
Gilead
MSD