Va hacer dos años que murió mi marido, no por el virus, y desde entonces me estoy dando cuenta de lo difícil que lo tengo para poder rehacer mi vida. Me da miedo decir la verdad, me da miedo hacer sexo, no confío en nadie para contarle lo mio.
En fin, un dilema, porque si conoces a alguien y quiere hacer sexo, ¿que hago, se lo digo? pero claro, si se lo digo, adiós muy buenas, encantado de conocerte y hasta nunca.
Y si no se lo digo y la cosa va bien, en algún momento se lo tengo que decir, y claro te va a odiar toda la vida por no habérselo dicho. Supongo que esto os pasa a todos pero para mi es nuevo y no se por donde tirar.
Un abrazo.