Desde mi diagnóstico [VIH+], que dicho sea de paso ha sido reciente, ese sentimiento embarga mi alma con más frecuencia, llenando cada rincón de mi cuerpo, cada pensamiento, cada momento, cada instante a mi alrededor. Luego, aunque esta condición no me afecte tanto, me lleno de tristeza y ansiedad y mi mundo se despedaza.
Sí, a través del tiempo grandes avances se han logrado, pero nos enseñaron desde pequeños que tener lo que nosotros tenemos, vivir con lo que nosotros vivimos, era una sentencia de muerte, y nuestra mente nos hace una jugada para convencernos que así es, que tenemos nuestros días contados, que poco a poco nuestra luz se va ir apagando y que si alguien sabe lo que llevamos dentro se alejara.
La ignorancia es un arma poderosa, en mi caso si me preguntaran antes de saber mi diagnóstico, no sabía ni la mitad de lo que sé ahora, y probablemente si alguien me hubiera dicho que tenía esta condición, por mi propia ignorancia, me hubiera alejado y eso es lo que me da más miedo, que las personas se alejen y quedarme solo. No quiero estar solo, no porque no me guste la soledad, pero el pensar que lo estaré hasta que mi corazón deje de latir me mortifica. En mi mente y cuerpo se han colocado cadenas invisibles que me atan, me asfixian y me limitan. Vamos a sobrevivir cuanto sea posible, pero honestamente yo solo quería vivir.
Quisiera encontrar a alguien que me tome de la mano y me diga que, aunque todo se derrumbe, vamos a salir juntos de esto. Tengo miedo, miedo de todo y de nada y deseo que algún día, pronto, pueda haber una cura. Cargar esto en los hombros es más difícil de lo que pensaba, emocionalmente estoy mal y por ser de un país subdesarrollado la atención psicológica no es brindada.
Necesito ayuda, pero no sé adónde acudir, me siento como en el cole otra vez, como un bicho raro. Aunque por fuera nadie lo vea, por dentro me estoy derrumbando.
Para aquellas personas que llevan más tiempo que yo viviendo con esto, querría preguntarles: ¿alguna vez mejora? ¿Alguna vez la desesperanza se va? ¿vuelves a ser feliz? ¿Puedes ser feliz?
Quiero mantenerme positivo, pero es desgastante pretender que todo está bien cuando no lo está. Soy un barco a la deriva, un náufrago perdido, sin rumbo ni destino, y hoy que el año comienza mi futuro está nublado. Quiero tener fuerzas, pero ya no sé si quiero seguir luchando. Me duele mucho el corazón y el alma.