Luego, le tuve que decir a mi ex, con quien regresé, que yo era VIH+. Me aceptó, pero terminamos hace dos años. Entonces conocí a una persona maravillosa con quien estoy viviendo ahora y que no ha tenido ningún problema en que yo porte el VIH. Él me preguntó, ya que su ex también era VIH+, y, aunque me ha dicho que no quiere nada serio, se pone celoso y me confunde mucho.
Sé también que trata de ser sincero para no lastimarme, me anima a terminar lo que inicié. Quiero terminar una carrera profesional, quiero tener mejores ingresos, viajar, apoyarlo también y ayudar a mi madre a vivir mejor. Tengo sueños que quiero cumplir, tener mi propio hogar y alguna vez encontrar a esa persona que me valore y me ame como soy. Que, más allá de traer conmigo un virus, eso no refleja mi conducta mi mis valores ni mi irresponsabilidad sexual.
Creo que muchas veces las personas que vivimos con el VIH nos ponemos barreras que, a veces, a la gente le valen. Por lo mismo, quienes lo tenemos [el VIH] deberíamos valorarnos y también decir nuestra condición al conocer a alguien. Si dejamos pasar el tiempo y los y las conocemos, el peso de nuestro silencio será devastador.