Para mí el mensaje es cuidarse, pero no discriminar

Alan

Con este chico fue muy loca la historia mi primer amor, el chico que les conté que tenía VIH. Yo lo vi una vez en 2013 en verano, como en octubre. Me shockeo lo lindo que era, una mirada muy atractiva, su cara y su cuerpo también en general, aunque ya no sé cómo será ahora. Bueno, lo vi esa vez y me quedé enamorado porque él me quiso avanzar, pero le puse una excusa como que había alguien ahí afuera algo así, no me acuerdo. Él me siguió porque me fui ahí nomás y me pidió mi número. Aunque me encantaba le dije una boludez, algo así como: "dejémoslo informal" o una estupidez así, ja, ja.

Bueno, me arrepentí un montón de no haberle dado mi número después porque no era probable que lo volviera a ver ya que no tenía ningún dato de él, nada. Yo le contaba a mi amigo gay (el único amigo gay que yo tenía y sabia mi condición) lo que había pasado. Siempre me acordaba de ese chabón, me mostraba por ejemplo una foto de un amigo suyo y me decía: “mira, este es lindo, si querés te lo presento”, medio en chiste y cosas así y yo le decía: "no, es que nunca voy a encontrar un chabón tan lindo como ese y que vi esa vez". Claro que él tenía una mirada muy atractiva, era un amor platónico casi amor a primera vista (?) pongámosle.

Pasaron los meses y, bueno, como solía ir a ese lugar, un día de enero de 2014 (o quizá a principios de febrero, no me acuerdo) ¡lo volví a ver! Me río de lo que sentía y hacía en aquel momento. Él quería que fuéramos a un telo, pero le respondí que no, que me diera su número y que le mandaba un mensaje. Le mentí con mi nombre y le di uno falso, ja, ja. Claro, era una vida oculta y pensaba: “¡no puedo dejar que me conozca alguien de este lugar!”.

Bueno desde ese momento empezamos a enviarnos mensajes de forma constante. Fui corriendo a decirle a mi amigo gay que había vuelto a ver al chico que me había gustado tanto en esa época. Bueno, después descubrí que además de lindo él era una buena persona, muy lleno de vida y muy positivo. Era todo lo contrario a mí, que siempre veía el lado oscuro de todo. Para mí era el combo completo y me enamoré rápidamente. Una cosa loca porque ni un beso nos dimos, ni sexo nada. Por cierto, yo nunca tuve sexo en ese lugar de "encuentro", solo iba para calentarme viendo chabones y por la adrenalina de que alguien te pueda ver mirándole el paquete a otro chabón.

Bueno, después de que intercambiamos números planeamos nuestra primera cita y él me pasó a buscar en auto cerca de mi casa y fuimos al cine. Llovía como si fuera a acabarse el mundo esa noche. Bueno con él empecé a "descubrir el amor", nos besamos por primera vez en el auto y yo tenía mucho miedo de que alguien nos viera. Me acuerdo y él era muy sereno, eso me encantaba. Yo como que me preocupaba por todo y él siempre se lo tomaba todo con calma o al menos actuaba con calma, otra cosa que me gustaba de él.

Bueno, vimos una película y al acabar me preguntó si me llevaba a mi casa o íbamos a otro lugar. Le respondí que fuéramos a tomar un trago. Me acuerdo que en esa época tenía varios problemas en mi mente, todo un lío, y yo solía tomar. Así que fuimos a un bar, pero antes de bajar del auto empezamos a hablar de varias cosas, ya que yo, como les digo, siempre veía (y creo que sigo igual) el lado negativo de todo y contraponíamos puntos de vistas del mundo y fuimos conociéndonos más y llegamos a hablar de temas bastante profundos rápidamente, porque yo veía todo como un gran drama el mundo y él lo veía de un modo más tranquilo, seguro y positivo.

Yo estaba impactado, enamorado, ja ja… Bueno, vuelvo al tema. Llegando a hablar temas profundos antes de entrar al bar, él me contó entre lágrimas que hacía un año le habían diagnosticado de VIH. Yo lo abracé automáticamente y lo besé. La verdad es que, raro en mí, actué con tranquilidad y le dije que estaba todo bien. Él me dijo que si quería nos íbamos y me llevaba a mi casa. Le respondí que no y fuimos a tomar en el bar. Sin embargo, noté que él pidió solo un trago pequeño y bueno yo me tome una cerveza grande. Quise compartirla con él, pero no aceptó. Yo no comprendía por qué se cuidaba tanto con la bebida, aunque después entendí el porqué.

Resumiendo un poco, fue un amor muy hermoso en ese momento de mi vida, ya que, como les dije, vivía una etapa oscura por problemas familiares y cosas así que ya no soportaba y él era algo bueno para mí. La verdad, duramos un tiempo, no teníamos sexo excepto porque él me practicaba sexo oral, cosa que sabía que no era riesgosa y además me decía que estaba indetectable.

Después de esa primera noche en que me hizo sexo oral yo temía haberme infectado, ya que al otro día me cayó la ficha, era como si estuviera adormecido y recién me despertaba de lo que pasaba. Él me apoyó mucho, me contuvo. Tanto jodí yo con el tema que fuimos a ver un amigo suyo que era médico infectólogo y me confirmó que no había riesgo al recibir sexo oral. En realidad el riesgo era más teórico que real.

Bueno, fue linda la conexión que tuvimos, pero todo se deterioró muy rápido por el tema de que yo ni lo tocaba a él en sus partes por ser explícito y el único sexo que teníamos era él que me practicara sexo oral. También hubo problemas de celos que él tuvo conmigo por una vez que salimos a bailar a un boliche y él confundió todo y se enojó mucho conmigo y al poco tiempo me dejó. Me explicó que no podía estar con alguien que no se sentía seguro teniendo sexo y no era pleno sexualmente con él, además de que él pensaba que yo le era infiel por esa situación mencionada. Fue como un balde de agua fría que me cortara así, ya que por mi yo hubiera pasado el resto de mi vida a su lado, y él decía lo mismo.

Leyendo en internet yo aprendí mucho sobre el VIH y las parejas serodiscordantes porque planeaba seguir con él por mucho tiempo. Ja, ja, me río de mi yo de esa época ¡Qué infantil! Después de cortar me hice muchos test durante varios meses para ver si tenía el VIH. Gracias a Dios dio todo negativo, puesto que eran relaciones de bajo riesgo. Bueno después me costó superar el abandono. Estaba cerrado al amor hasta que conocí a un chico rubio muy lindo, alto, musculoso y que también se moría por mí. No sé por qué se enganchó tanto conmigo. Yo no conectaba con él, aunque sí que podía tener sexo pleno digamos y era más lindo que el otro.

No obstante de esta otra persona nunca me enamoré y aunque me insistió lo dejé porque él quería estar conmigo y me entere que tenía un novio que le pegaba según él y por eso no lo dejaba y a la vez quería estar conmigo. No los enrosco más y el tema es que lo dejé en diciembre y no supe más de él. Con él me corté el frenillo y también sangré y todo. Los 2 nos asustamos, pero ahora sé que no tengo nada porque ya me hice el test y no tengo ninguna ETS. Sin embargo ha sido un infierno para mí.

Con respecto al VIH creo que me quedó un trauma por verlo tan de cerca y saber que uno no está salvo de nada, que hay que sea cauteloso siempre. Este marzo tuve una relación promiscua y temí otra vez. Me hice el test de Elisa al mes, a los 2 meses, a los 3 meses y a los 6 meses (hace días). Por suerte los 4 dieron no reactivo, y a los seis meses también fue de hepatitis y sífilis.

Por suerte todo salió bien, pero el mensaje para mí es que hay que cuidarse siempre, sin importar quién y cómo se vea la persona y, a la vez, nunca discriminar a las personas con VIH, porque pueden ser la persona que amas. Incluso tú mismo puedes contraerlo, y no es signo de promiscuidad ya que mi novio en ese entonces me dijo: “yo no entiendo porque haces tanto caos por solo sexo oral, si yo no te hubiera dicho que tenía la infección probablemente habríamos tenido sexo y todo esa noche de la primera cita”.

El tema es que les digo que mi primer amor fue una persona con VIH y me abrió los ojos al amor y a saber que las enfermedades de transmisión sexual están más cerca de lo que pensamos y que hay que cuidarse. Nadie lleva un cartel que diga “soy VIH positivo”, y que los que tienen VIH pueden ser personas plenas felices y llenas de vida, incluso más que alguien que no tiene la enfermedad. Es más si midiera la plenitud de mi vida con la de mi ex, el chico con VIH, puedo decirles que él es más feliz que yo en muchos sentidos e irradia alegría y felicidad. Por eso me parece que se debería quitar el estigma a esta enfermedad y ser más abiertos y no pensar “a mí nunca me va a pasar” o “eso pasa en las películas”.

Bueno en conclusión ahora me cuido más, me enfoco más en mis planes, cosa que he aprendido leyendo sus historias y habiendo tenido yo personalmente una historia de amor con una persona con VIH. Hay que disfrutar la vida al máximo, amar a quienes tenemos cerca. La vida es muy corta y ante los ojos de Dios somos todos iguales, de aquí no nos llevamos nada y hay que amarse unos a otros. Dar y recibir amor y disfrutar la vida, sin discriminar a nadie, porque solo quien te conoce sabe lo que cada uno vive y por lo que hemos pasado.

Me despido de ustedes los que me leen y les mando a todos un abrazo muy grande. A quienes viven con VIH, decirles que los admiro por su fuerza valentía y su forma de sobreponerse ante la dificultad. Que Dios los bendiga a todos.

Gracias por dejarme compartir mi historia con ustedes, me siento cerca de sus historias por la mía misma. Bueno, ya no lo alargo más. Nos estaremos leyendo ¡Adiós!

Deja un comentario

Redes sociales

¿No quieres perderte nada?
Síguenos en todas las redes

Gilead
MSD
ViiV
Gilead
Janssen
MSD
ViiV Healthcare
Abbvie
Abbvie
Abbvie
Abbvie
Gilead
MSD