Económicamente la vida no me es fácil en Argentina, pero me siento muy apoyado por los que más quiero. Sueño positivo aunque a veces no tengo ni ganas de levantarme a la mañana.
Respeto el tratamiento estrictamente, como sano, no bebo ni fumo. La medicación a veces me produce insomnio y pesadillas.
Quiero vivir para conocer a mis nietos y ver felices a mis hijos. Creo en la buena gente y espero no llegar a ser una carga para nadie. Sigo con proyectos aunque mi físico a veces me resulte una mochila pesada.
Todo pasa, y seguirá pasando así que no me voy a quedar atrás. Me encantaría poder disfrutar más de la vida sin cansarme físicamente.
Nunca fui religioso, pero creo en la gente. Quizás soy un poco idealista pero ya no creo que cambie, todo lo que viví siempre lo disfruté sin culpas. Si me tocó ser seropositivo será por algo y debo superarlo.