Después, pude conocer bien la identidad del responsable. Al año siguiente, comencé la universidad, por lo que me distraje y pues, poco a poco, traté de no pensar en aquello que me sucedió ese 31 de octubre. Tuve algunas relaciones en ese tiempo, ninguna importante. Después de dos años, me enteré por alguien de que quien me violó tenía VIH.
Me dolió mucho y sufrí un tiempo sin hacerme ninguna prueba (pues temía confirmarlo). Una vez fui a hacerme el test, las muestras no sirvieron, por lo cual tenía que repetirlo. No quise. En octubre del año pasado comencé a sentir que mi salud decaía. Tomé valor y nuevamente me hice el test, el cual dio VIH+. Ya no sufrí, pues muy en el fondo sabía que estaba infectado. Había estado desde mucho tiempo solo por temor a infectar a alguien y no ser sincero. No comencé el tratamiento no sé el porqué. Me llené de miedo y desinformación que leía en la web.
A comienzos de este año decaí mucho más, perdí mucho peso y me veía demacrado. Tuve pensamientos de dejarme ir. Mi familia notó algo extraño y me insistía en regresar a casa (estudiaba en Bogotá). Al final regresé a mi tierra, fue muy duro para ellos verme cómo llegué a estar. Tuve que moverme por los servicios de salud de donde vivo y comenzar todo el proceso nuevamente. En ese tiempo me debilité aún más. Estuve hospitalizado, creí que moriría. Pero fui fuerte y como que aún no era mi tiempo. Decidí contárselo a mi hermana y luego a mi madre, fue algo duro en realidad. Después de todo un proceso, pude por fin comenzar el tratamiento antirretroviral. Hace ya tres meses que ando muy juicioso con el tratamiento. He vuelto a verme bien, aunque todavía falta.
Volví a sentir deseos de estar con alguien, de amar, de sentir cosas bonitas por una persona. Pero me es difícil entablar algo sin sinceridad. No quiero mentir, y quiero que quien quiera estar a mi lado esté informado de mi diagnóstico. Desafortunadamente, en mi país (Colombia) el tema de tener el VIH es visto con mucho tabú. He hablado con chicos muy agradables, pero no puedo continuar ni formar nada porque deseo hablar de lo que tengo. Sin embargo, se me forma un nudo en la garganta que no me deja hablar. Me siento solo y he visto que mi vida continua y que quiero continuarla amando y sintiendo que alguien me ama y me apoya. Siempre ha sido más fácil para mí expresar mis sentimientos y deseos por medio de la escritura.
No sé si por aquí me será viable entablar una conversación o relación con alguien. Considero que sería más fácil conocer a un hombre en mi misma condición para podernos comprender mejor. Ya no pienso en dejarme ir. Hay tanto que quiero hacer y conocer, y no dejaré que esto acabe con mi vida.
Dejé muchas cosas atrás, pero sé que hay muchas más que vienen. Qué lindo sería poderlas vivir y compartir con alguien que se gane mi amor y me ame. Bueno, pues, espero que lean mi historia y se motiven a luchar, a vivir y a no dejar que un mal suceso acabe con sus vidas. Saludos.