Hace 20 años de eso y aquí sigo hasta que dios quiera. Lo único es que no tengo compañera, pero ese es el precio que estoy pagando y no le doy más vueltas, que me mareo.
Alguna vez sí que he pensado: “¿y si no hubiese hecho esto y hubiese hecho lo otro?”. Si digo que no lo he pensado sería un mentiroso, pero ¿de qué me sirve? Tengo 42 tacos y era un crío (tenía 21 años) cuando se me arrimó el demonio y me dijo: “toma esto, ya verás qué rico” y me engatusó.
Y nada, esta es mi historia a grandes rasgos, seguro que parecida a la de muchos compañeros. Hasta siempre, amigos.