Por cosas de la vida y mis estudios decidí alejarme de él, pero pasó un tiempo y empecé a tener muchos dolores de cabeza, malestar general, náuseas y me salieron unas pequeñas heridas en la garganta. Pensé en lo peor y lo primero que se ocurrió es ir a un laboratorio y hacerme la prueba del VIH.
Cuando fui para recoger los resultados me dijeron que tenía que hacerme otra prueba más de sangre. Y después de eso volví para mis resultados y el médico me dio la noticia de que tenía el VIH.
Me asusté mucho y lo primero que pensé fue en mi ex. Pasó un tiempo y él me escribió para decirme que me extrañaba y que quería volver a verme.
Yo me negaba, no quería saber de él, pero insistió tanto que decidí verlo. Nos encontramos y entonces le conté que tenía el VIH. Él lo tomo como una broma y me dijo que él siempre ha estado bien. A esto yo le dije: “Entonces no sé cómo me infecté si solo estuve contigo”.
Él me miraba y me decía: “ya me hiciste preocupar, ahora tengo que salir de dudas porque yo no he tenido ni un síntoma, pero si lo tuviera no te pongas triste si lo tengo o no lo tengo no te abandonaré pase lo que pase, tú tranquilo estamos en esto nos tenemos el uno al otro”.
Esto me dio un poco de paz, pero a la vez inquietud de cómo me infecté. Quizá fue por mis anteriores parejas… no lo sé a veces me pongo pensar muchas cosas de mi ex… Pienso que él lo tenía y no me lo dijo o me trata de confundir. Él dice que se hizo la prueba y salió negativa. Entonces no entiendo todo esto.
Ahora llevo una vida normal, tomo mis medicamentos y me siento bien. Le pedí que fuera conmigo a hacernos una prueba y dice que no tiene tiempo. Pienso que en toda nuestra relación él me mintió.
No sé qué hacer, lo alejo más de mi vida y vuelve a aparecer y ahora quiere volver a pesar de todo.