Al comienzo me dio duro por mi ceguera, lo cual me llevó a permanecer 3 años encerrado. Un amigo me habló de un centro de rehabilitación para ciegos en mi ciudad ya me movilizó. Solo lo que me ha costado es aprender a usar el computador. Confiando en dios voy a terminar este proceso.
Quiero graduarme de secundaria con mis 46 años y lo voy a hacer, nunca es tarde y ¿por qué no?, la universidad. Tengo mucha verraquera para hacerlo, pero no hay dinero.
Soy soltero sin hijos, pero dios me regaló 18 sobrinos y 4 hijos de sobrinos. Somos 10 hermanos y mi madre. Yo vivo con ella, es un amor conmigo. Mi padre murió hace 30 años.
No ha sido fácil convivir con la ceguera y el VIH, pero el amor de cristo conmigo es muy grande.
Bueno amigos esta es mi historia, un abrazo desde mi Bucaramanga, ciudad de los parques, las cigarras y hormigas colonas (estas son muy ricas para comer sofreídas). Que dios los bendiga por todo, chao.