El caso es que no se lo he querido decir porque el día que así lo haga se morirán de la preocupación y la angustia de verme enfermo. Espero que mis días de salud duren algunos años para poder verlos morir, como es natural, primero deben irse los padres, ¿no? Tengo hermanos, pero no dudarían un segundo en contarles mi condición a mis padres, por eso tampoco se los he dicho.
En cuanto a mis amigos, a los que cabe decir que solo veo cuando se organizan fiestas o salidas para diversión (me he alejado un poco de ellos), ellos sin saber bromean sobre la enfermedad. Cuando lo hacen me siento un tanto triste pues me recuerdan mi condición, a escasos meses de mi diagnostico. Hay días en los que me olvido de que tengo el VIH y trato de vivir una vida normal. En otros regreso a mi realidad y me doy cuenta de que he coartado en cierta manera mis planes. Moverme de trabajo no será fácil, vamos ni siquiera resultaría fácil moverme de ciudad, por el registro en la clínica para los medicamentos. Todo eso me frustra un poco.
Yo soy plenamente consciente de que Dios nada tiene que ver en esto, ÉL (si existe) es el menos culpable, pues todo esto yo solito me lo busqué. Solo una persona conoce de mi condición y ese es mi jefe en el trabajo. He corrido con una gran suerte en ese sentido pues solo he recibido un apoyo incondicional de su parte. En estos momentos aún me siento un tanto confundido, no tengo miedo de morir, pretendo enfrentar esto de la mejor manera posible, siguiendo cada instrucción de mi médico. Meditando, la verdad no sé qué me espera, si viviré muchos o pocos años. Razonablemente nadie “sano” querría enrolarse conmigo y quizá yo haría lo mismo. Por eso considero que las posibilidades de encontrar una pareja son más que nulas, no creo estar preparado para algo así en este momento.
Solo espero vivir día a día de la mejor manera posible, disfrutar el respirar, disfrutar el estar aún sin síntomas, convivir con mi familia y decirles que les amo, abrazar a mis padres, a mis hermanos y sobrinos. Tampoco tengo relación ni conozco a alguien con mi condición. En fin, escribo esto pensando en que no estoy solo, ni soy el único diagnosticado, solo quería compartir mi historia, acerca de cómo está siendo mi experiencia con el VIH.