Me iba a hacer un examen para descartar leucemia y, antes del examen, me lo dijeron. Se pueden imaginar que me cayó como un balde de agua helada. Primero porque ya llevaba 20 días en la clínica y luego esta situación.
Mi vida ha sido de constante lucha, me he sobrepuesto a lo que he tenido que enfrentar durante mi vida.
Desde los 5 años fui abusado hasta que tuve la fuerza de no permitirlo. Amo a mi familia, pero durante mi adolescencia mis hermanas me ridiculizaban por que se habían enterado de mi abuso.
En mi mente siempre fue ser mejor cada día, porque además no teníamos recursos económicos, pero creo que tuve la mejor madre del mundo, que nos ayudó en nuestras decisiones para salir del hueco en que estuviéramos. Siempre nos decía: “si se caen, levántense”.
Y así ha sido durante toda la vida. Hoy quiero dar una voz de aliento a tod@s los que sufrimos de esta enfermedad. Es duro, no es fácil para ningun@, pero debemos levantarnos, debemos ser fuertes.
Un día más es una ganancia, pregunto ¿quién se quiere morir sea de lo que sea? Nadie, ni tú ni yo. Entonces hay que enfrentar nuestra enfermedad. No sabemos cuánto vamos a vivir. Un día, un año, 10 o 30 años quizás…
Es lo único que tenemos seguro, que tenemos que cambiar nuestro estilo de vida, claro que sí. Ser más responsables con nosotros mismos y el resto del planeta. Hay personas que nos aman a pesar de todo, tu amig@, tu familia, tu compañer@…
Eso sí, nuestra situación solo se la podemos contar a personas que uno considere de infinita confianza, porque no falta la persona que en algún momento quiera hacernos sentir mal y herir nuestros sentimientos.
Quisiera escribir muchas cosas más. Si quieren saber de mí luego nos contactamos, pero mi mensaje es ser fuertes y levantar nuestra frente y continuar siendo buenas personas hasta que Dios nos lo permita. Abrazos.
