El año pasado caí enfermo, me salió una úlcera en la amígdala izquierda y no podía comer ni tragar. Pasé de médico en médico, me hicieron 4 biopsias, hasta estomatólogos vi y nada.
Hasta que me cansé y me fui al hospital público donde me hicieron otra biopsia resonancia y un análisis de sangre. Al otro día me dijeron que tenía el VIH. ¡No lo podía creer! Los resultados de más análisis indicaron que estaba casi en sida, así que me internaron. Lo que tenía era una enfermedad oportunista.
Empezó el tratamiento y hoy estoy indetectable. Mi mujer jamás se infectó. Yo hice macana cuando me separé. Estoy seguro de que ahí alguien me pasó el virus.
Hoy sigo con ella, que fue mi respaldo. A todo solo se lo conté a mi familia y a un amigo, a nadie más. La gente es muy ignorante así que prefiero guardarme esto.
Hoy trato de no pensar, de vivir, de cuidarme. No fumo más, no tomo de más, hago ejercicio…
Y estamos buscando un hijo. Con mi pareja muchas veces no más cuidamos. Gracias a Dios jamás se infectó, pero sabemos el peligro que ella corre, aunque hoy en mi estado es menor el riesgo, pero siempre está.
Solo esperamos nuestro bebe que Dios más lo mande.
Fuerza a todos no es el fin de nada. No piensen en el virus, sigan adelante y a cuidarse.