El 6 de enero de 2020 fui a realizarme la prueba de VIH y resultó positiva. Aún no inicio el tratamiento, ya que falta que me den los resultados de carga viral y CD4. Estoy sumido en una terrible depresión, ya que realmente no sé cuánto tiempo llevo con el virus en mi cuerpo y me da miedo que la carga viral sea realmente muy alta y los CD4 muy bajos.
He leído que si el porcentaje está en menos de 200 estaría en fase sida. He consultado varios médicos con gran renombre, y me han dicho que, aunque estuviese en esa situación, apegándome a los medicamentos puedo salir de esa etapa y llevar una vida normal. Me han visto en persona y me dicen que no creen que esté en esa fase por mi aspecto físico. Al respecto, todos me han mencionado que me veo bien a pesar de que ya traigo algunos síntomas como un ganglio inflamado, las amígdalas inflamadas, el estómago revuelto…
He leído varias historias de esta página, de cómo han salido adelante a pesar de estar en una fase crítica. Eso me alienta a pensar que yo llegue a tiempo para iniciar con el tratamiento. Espero en Dios todo salga bien, porque desde el diagnóstico me la he pasado llorando, en una profunda depresión.