Como estaba por terminar la licenciatura, dejé un poco de lado mi salud aunque me inquietaba saber el porqué de esa inflamación. Investigué en Internet y me pareció que era por una bajada de las defensas y que podría deberse a algún tumor o al VIH.
La verdad es que me espanté mucho, porque en dos ocasiones tuve relaciones sin protección con personas que apenas conocía, así que acudí al médico acompañado de mi mamá y sí, me mandó a hacer la prueba de Elisa para descartar VIH.
Yo, muerto de miedo, fui con mi mamá a hacerme la prueba y ese mismo día recogí los resultados en la tarde. Para esto me acompañó mi pareja y cuál fue la sorpresa que salió positivo.
En ese momento él lloraba y gritaba, puesto que no nos cuidamos en algunas ocasiones. Yo lo primero que pensé es que moriría joven y después que de nada sirvió estudiar una licenciatura pues nadie me contrataría.
Ya han pasado dos meses de eso, me hicieron más estudios y un conteo de carga viral y ya estoy en tratamiento. Mi familia me apoya de manera incondicional y mi pareja también. Él también ya está en tratamiento, mis ganglios se han desinflamado y mi energía ha vuelto.
Sin embargo tengo miedo de buscar trabajo y de que no me contraten por esta situación y aunado a eso soy recién egresado. Quizá no tengo temor de informarlo a mi contratante, ya que sé que no tengo que hacerlo si no quiero, el temor es que ya trabajando tenga que pedir permiso cada mes para recoger mis medicamentos y cada tres meses para hacerme el conteo viral.
Les agradecería me compartan sus experiencias laborales y cómo ha sido el trato en los sistemas de salud a los que hayan ido, ya que tengo entendido se atiende en hospitales, ya no en las clínicas. De antemano gracias.