Cuando contaba con 26 años de edad una persona se aprovechó de mi ingenuidad y mi estado depresivo. En busca de consuelo, se me ocurrió ir a una iglesia donde conocí al hombre que me infectó con VIH. Ahora me encuentro en un ser o no ser.
Vivo con VIH, pero no necesito medicación y mis defensas están en perfecto estado. En mi tiempo libre me siento sola porque no consigo conocer a gente en España que se encuentre en mi misma situación.
Para mí es muy importante compartirlo todo con mis amig@s, y temo que si digo a la gente sin VIH que soy seropositiva, quizá se lo piensen dos veces antes de ser mis amigos o quizá no crean mi historia o les dé por juzgarme en lugar de apoyarme. Mi e-mail es.
Gracias. Un beso.