Desde entonces, ya no había trabajo para mí, buscaron a otra. Llamé a la empresa buscando una respuesta y no la obtuve. Callaron y no me dijeron nada. Sé que es porque tengo el VIH, pero no me dicen nada. Desde entonces, tengo otra vez depresiones, me siento mal, muy mal.
Necesito trabajar tanto por razones económicas como psicológicas. Lo estoy pasando fatal.
Un abrazo.