Sin embargo en algunas ocasiones me llevé sorpresas desagradables al enterarme que en algún momento se habían quitado el condón sin que me diera cuenta. Y no pasó una sola vez, fueron cuatro en total, cuatro personas diferentes.
Yo no perdí los nervios de inmediato, lo más probable es que no fuese nada, pero la duda seguía carcomiéndome hasta el alma.
Dejé de tener relaciones sexuales para concentrarme completamente en mi carrera por varios meses a la vez que esperaba al menos otros seis meses para hacerme la prueba y no obtener falsos negativos por la ventana inmunológica.
Pedí la cita con mi médico de familia para hacerme la prueba, pero solía postergarla y postergarla (no me pregunten por qué, porque no lo sé, seguramente era miedo). Nunca sentí síntomas de nada, estoy completamente sano salvo por una que otra gripa cada dos meses, lo habitual.
Finalmente acudí al médico, firmé el consentimiento y me realicé la prueba. Estoy actualmente esperando los resultados, cada segundo que pasa me pongo más intranquilo, pienso en aquellas personas que se quitaron el condón (actualmente con ninguno sigo en contacto), pienso en cuántas veces lo habrán hecho con otros, cuántas veces se habrán expuesto. Si no se preocuparon por su propia integridad, ¿acaso se iban a preocupar por la mía?
Estuve leyendo testimonios de otras personas, al parecer esa práctica de quitarse el condón está más extendida de lo que cualquiera se imaginaría.
Tengo miedo de convertirme en otra estadística, en otro número más como aquellos con los que estuve haciendo informes para mis presentaciones en la facultad.
Vivo en una ciudad pequeña, conservadora, seguramente también llena de prejuicios. Si estoy infectado significaría un cambio drástico en mi vida. Espero contarles cómo va todo, los resultados me llegan mañana o quizá en el transcurso de esta semana.
Les envío un gran abrazo, y escribo esto como reflexión para aquellos que tienen una vida sexual activa, para que se cuiden a ellos mismos, revisen cada tanto que el condón sigue en su sitio. Y para quienes practican la moda de quitarse el condón, espero que reflexionen. Esa actitud desinteresada y egoísta va a terminar arruinando muchas vidas, incluso la de ellos mismos.