Un día mi tía decidió llevarme al médico y me hizo unos exámenes de sangre completos, incluyendo un examen de VIH que salió positivo. Estuve un tiempo en tratamiento psicológico, pero después no fui más. Mi inféctologo me decía que puedo vivir mi vida súper normal.
Ahora mismo ya llevo 5 años con el VIH y aquí sigo luchando y mirando siempre para delante. Sin embargo, tengo una pareja que es menor que yo y eso me trajo muchos conflictos con sus padres. Ellos no me dejan estar con su hijo porque tienen miedo a que yo le transmita el VIH. Llevo ya 7 meses con esta persona y quiero seguir con él cueste lo que cueste, ya que estoy enamorada, quiero seguir luchando y quiero seguir viva.
Nunca hay que rendirse. Yo siempre digo que el que quiere puede.