Comenzar a nadar
La natación es uno de los deportes más completos y sanos que existen. Las personas con VIH pueden obtener beneficios para su salud gracias a la práctica de este deporte.
La natación es uno de los deportes más completos y sanos que existen. Las personas con VIH pueden obtener beneficios para su salud gracias a la práctica de este deporte.
El uso de anabolizantes en personas con VIH es un tema bastante controvertido. Por una parte, la infección por VIH se ha mostrado capaz de reducir la masa muscular corporal y de rebajar los niveles de testosterona. No obstante, el empleo de sustancias anabolizantes -que están basadas en la testosterona y ayudarían a compensar el … Leer más
El acuaeróbic constituye un tipo de ejercicio muy saludable tanto para la población general como para las personas con VIH, ya que combina el ejercicio físico intenso de resistencia, típico del aeróbic, con la protección de las articulaciones que proporciona la realización de ejercicios en el agua. El hecho de encontrarse con el cuerpo semisumergido … Leer más
Los múltiples beneficios que aporta el ejercicio pueden ser la motivación que te impulse a iniciarte en su práctica. Si hace mucho tiempo que llevas una vida sedentaria, tómatelo con calma. Es preferible comenzar progresivamente, dado que una sobrecarga de trabajo puede provocarte dolores musculares por sobresfuerzo. Además, debes tener en cuenta que realizar ejercicio … Leer más
Realizar ejercicio es un hábito muy saludable para cualquier persona, pero de una manera especial para aquéllas que viven con VIH. Diferentes estudios han evidenciado que hacer ejercicio físico incrementa el recuento de CD4 y mejora los niveles de los lípidos sanguíneos -reduciendo el riesgo cardiovascular-.
El ejercicio de fuerza (pesas, máquinas…) ayuda a recuperar la masa muscular, que puede verse disminuida debido a la infección por VIH. De hecho, algunos estudios muestran que es ideal una combinación equilibrada de ejercicio basado en la fuerza y ejercicio de resistencia (correr, nadar…). Alternar estos dos tipos de ejercicio permite ganar músculo y reducir los niveles de lípidos sanguíneos. También incrementa el apetito y proporciona un mayor bienestar personal, ya que el ejercicio favorece la secreción de endorfinas, sustancias generadas por el cerebro que producen placer. Por todo ello, el ejercicio físico contribuye a una mejora de la salud y la calidad de vida de las personas con VIH.