Problemas sexuales

La disfunción sexual debida tanto  al VIH como a los efectos secundarios del tratamiento anti-VIH como a otros factores, puede tener un gran impacto sobre tu calidad de vida.

El equipo de gTt

La disfunción sexual incluye tanto una reducción de la libido (una pérdida de interés en el sexo) como dificultades físicas (falta de erección o dificultad para alcanzar el orgasmo).

A pesar de que la disfunción sexual no está señalada por lo general como un efecto secundario de los fármacos anti-VIH, diversos informes la han relacionado con los tratamientos que contienen inhibidores de la proteasa.

Es probable que se haya informado de menos casos de los reales porque a muchas personas les cuesta hablar con su médico/a de este aspecto de su vida. Es un tema que los/as médicos/as raramente preguntan a sus pacientes de forma directa.

A pesar de que la mayor parte de la investigación sobre disfunción sexual relacionada con el VIH ha sido llevada a cabo con hombres, cuando se incluyeron mujeres en estos estudios se registró un nivel de preocupación similar.

Por ejemplo, un estudio realizado a partir de cuestionarios anónimos rellenados por más de 900 personas con VIH que tomaban terapia combinada (80% hombres y 20% mujeres) descubrió que el 38% de los hombres y el 29% de las mujeres declararon experimentar una disminución del interés por el sexo. El 29% de los hombres declaró una disminución de la potencia sexual.

Causas

La disfunción sexual en personas con VIH puede ser ocasionada por un amplio abanico de temas médicos y psicológicos:

  • Los hombres y mujeres con VIH tienen menores niveles de testosterona en comparación con las personas sin VIH.
  • La depresión puede afectar a la salud sexual.
  • Muchos tratamientos para la depresión -como fluoxetina (Prozac®, Adofen®, Reneuron®), citalopram (Seropram®, Relapaz®, Prisdal®), paroxetina (Seroxat®, Casbol®, Motivan®) y sertralina (Besitran®, Aremis®, Altisben®)- pueden disminuir la libido y provocar dificultades de erección en hombres. Se considera que mirtazapina (Vastat®) tiene poco o ningún efecto sobre la libido y menos interacciones con los fármacos del VIH.
  • Los sedantes, tranquilizantes y otros medicamentos pueden producir disfunción sexual, al igual que el fumar, el alcohol y el uso de drogas recreativas/ilegales.
  • El uso a largo plazo de esteroides u hormonas masculinas.
  • Otro factor puede ser el estrés en la relación o debido al trabajo.
  • Los inhibidores de la proteasa han sido relacionados con la aparición de problemas sexuales.
  • La lipodistrofia y la neuropatía también están relacionadas con tasas más altas de disfunción sexual.
  • La disfunción sexual es más habitual en personas con VIH que no están tomando tratamiento respecto a las personas sin VIH.
  • La edad (más de 40 años), diabetes, cirugía pélvica, miedo al fracaso o hipertensión también pueden producir cambios en la función sexual.

Tratamientos

Con tantas posibles causas, es importante que establezcas primero cuál es la responsable antes de decidir un tratamiento. Entre las aproximaciones al tratamiento de la disfunción eréctil están el counselling, aparatos que hacen el vacío, cockrings (anillos para el pene) y tratamientos como Muse® (un implante) y Caverject® (una inyección). Entre las medicaciones orales están sildenafilo (Viagra®), vardenafilo (Levitra®), tadalafilo (Cialis®), apomorfina (Uprima®) y yohimbina.

Niveles de testosterona

Si sientes que tu libido se ha reducido, pide a tu médico/a que te realice un sencillo análisis de sangre para comprobar los niveles de testosterona.

Para los hombres, el nivel normal de testosterona va de 3 a 10 ng/ml (10 a 30 nmol/l), aunque en este rango no se contemplan los cambios por la edad. Si tus niveles son menores que éstos, puede realizarse un tratamiento de reposición de testosterona mediante la aplicación de parches, gel, implante o inyección.

Si tienes otros síntomas (baja libido, fatiga, etc.) entonces el tratamiento de testosterona es una opción que puedes probar aunque estés dentro de los niveles “normales”.

Si es efectiva, los niveles más altos de testosterona deberían reducir la depresión y la fatiga y aumentar la libido.

La testosterona (en concentraciones mucho más bajas) también se está estudiando como un tratamiento de la disfunción sexual en las mujeres. Pueden producirse efectos secundarios con los que hay que tener cuidado, como crecimiento del vello, agravamiento de la voz y agrandamiento del clítoris.

Sildenafilo (Viagra®)

Los fármacos del VIH interaccionan con Viagra®. Las personas que toman una combinación basada en IP (inhibidores de la proteasa) o ITINN (inhibidores de la transcriptasa inversa no análogos de nucleósidos) emplean dosis más bajas, generalmente 25 mg en un periodo de 48 horas. Nunca debe tomarse Viagra® con poppers (nitrato de amilo). Viagra Viagra® y apomorfina (Uprima®) no están actualmente autorizados para mujeres aunque se están realizando algunos estudios.

Aspectos psicológicos

El modo en que te sientes contigo mismo y con tu cuerpo y cómo te sientes respecto al VIH puede afectar a tu salud sexual. Las personas sin VIH y la sociedad en general pueden reaccionar de modo irracional frente al VIH, lo cual puede afectar a tus sentimientos como persona con VIH.

Afrontar un diagnóstico de VIH, tanto si estás en tratamiento como si no, requiere mucho valor y perseverancia. Si el tratamiento funciona bien, puedes afrontar nuevas elecciones en la vida y si no funciona bien y tienes que gestionar una enfermedad o efectos secundarios, es de suponer que esto tenga un impacto en otros aspectos de tu vida.

Habla con tu médico/a. En ocasiones puede ser adecuado referirte a centros especializados para tratar la disfunción eréctil o recibir apoyo de counselling. Muchos centros tienen psicólogos/as con formación y experiencia en disfunción sexual.

Referencia: A guide to avoiding & managing side effects de la asociación británica i-Base.

Puedes consultar también la Guía de Salud Sexual para personas que viven con VIH Montárselo en Positivo.

Suscríbete a los boletines

Utiliza este formulario para suscribirte en los diferentes boletines. Si tienes cualquier problema ponte en contacto con nosotros.

Al continuar, confirmas que has leído el aviso legal y aceptas la política de privacidad.

Redes sociales

¿No quieres perderte nada?
Síguenos en todas las redes

Gilead
MSD
ViiV
Gilead
Janssen
MSD
ViiV Healthcare
Abbvie
Abbvie
Abbvie
Abbvie
Gilead
MSD