Cuando la psicóloga de una fundación me hizo saber que tenía el VIH pensé que no me quedaba mucho tiempo de vida. No me podía creer que tuviera tal enfermedad, ya que soy de un pueblito muy pequeño y pensaba que el VIH no llegaría hasta allá.
De ahí en adelante he tenido que enfrentarme a muchos obstáculos ya que soy del campo y debido a mi enfermedad no puedo desarrollar las labores que antes hacía por lo que me toco trasladarme a un pueblo más grande donde me siento muy mal porque no soy profesional y por lo tanto no consigo empleo.
Quisiera que alguien que me ayudase. Quiero vivir y tener mi compañera ya que me encuentro solo y me siento muy mal así.
Mis hermanos me ayudan en lo que pueden ya que ellos tienen sus compromisos. Quiero una oportunidad para salir adelante, quiero ser alguien en la vida, quiero tener una esposa un hogar y ser feliz a pesar de tener el VIH.
Soy de Colombia y sigo mi tratamiento juicioso, soy muy responsable y serio y estoy un poco confundido porque no sé qué será de mí cuando mi mama no esté, ya que ella es la que me acompaña donde vivo. Tengo 38 años y quiero salir adelante, quiero dar la batalla hasta el final, hasta que Dios me lo permita.
Muchas gracias por la atención prestada.