Sin embargo, con el tiempo vinieron las inseguridades, ya que en ocasiones se rompieron los preservativos. Finalmente me dijo que él no podía vivir con ese miedo de infectarse.
Ahora estoy sola, con el corazón destrozado pues la verdad es que lo amo y me duele que después de apoyarme quiera conocer otras personas sin el virus. También me da miedo enfrentarme más adelante a otra situación similar y que me vuelvan a dejar destrozada