Sé por lo que estás pasando. Soy seropositivo desde hace casi tres años y he sufrido el desprecio y la humillación de la gente en público. Un día, incluso, un supuesto amigo mío fue al lugar donde trabajaba y me pregunto "si era cierto" delante de muchas personas, y todas me miraron como si fuese a transmitirles el VIH por respirar el mismo aire.
Desde entonces, tenía pánico de salir a la calle, creía que todo el mundo me miraba y me criticaba, no lo podía soportar. Así que un día me dije: ¡yo también tengo derecho a vivir, ¿no?!
A mí me está costando mucho todavía, tengo mis bajones, pero intento que mi estado no me limite.
Sé que es duro, que la sociedad no está de nuestra parte, por ello, tenemos que armarnos de valor y vivir.
No estás solo, estamos todos aquí.
¡Un fuerte abrazo desde Valencia!